30 aniversario de la Hemeroteca Pública
de Oaxaca “Néstor Sánchez”
“En su alma se vio floreciendo lo que todo
hombre ha perseguido: La
Inmortalidad”: Arcelia Yañiz
Por Edgar BARTOLO RAMOS
La noche del pasado 22 de octubre, la Hemeroteca Pública
de Oaxaca “Néstor Sánchez” se vio llena de periodistas y amigos de Don Néstor:
se festejaron 30 años de la preservación de la historia del periodismo en
Oaxaca, festejo que al mismo tiempo era un homenaje a su iniciador, Don Néstor
Sánchez.
La parte oficial corrió a cargo de Carmen
Ruiz Castañeda, ex directora de la Hemeroteca Nacional
de México; la periodista Arcelia Yañiz, quien fuera colaboradora de Don Néstor;
y de Claudio Sánchez Islas, quien presentó el libro “30 años de Historia y
Testimonios” y a través de la lectura de “Domingos de Color Sepia”, nos mostró
al Néstor padre, periodista y luchador social que, como mencionó, “cambió para
siempre el fusil por la pluma”, continuando así con el homenaje al hombre de
formación militar que combatió en la Guerra
Civil Española y que sigue luchando a través de la Hemeroteca situada en
lo que alguna vez fuera el regimiento de caballería.
En el acto estuvieron presentes, entre otros,
Julia Inés Bohórquez, directora de la Hemeroteca; Doña Marías Islas, esposa de Don
Néstor; Alejandra Reyes Zárate quien ha laborado en la Hemeroteca desde sus
inicios y Emmanuel Toledo Medina, director del Instituto Oaxaqueño de las
Culturas.
La Hemeroteca inició con 410 volúmenes de diversas
publicaciones, 103 volúmenes con grandes diarios, semanarios, quincenarios y
307 volúmenes y folletos de la historia de Oaxaca. Actualmente cuenta con 4742
tomos de diarios y 5 mil revistas.
Cabe mencionar las palabras de Doña Arcelia
Yañiz refiriéndose a Don Néstor Sánchez, “En su alma se vio floreciendo lo que
todo hombre ha perseguido: La inmortalidad.
Para mí, como periodista novel, hacer un
reportaje sobre algo tan importante como lo es el festejo del 30 aniversario de
la Hemeroteca,
no es fácil porque hablar o escribir sobre la Hemeroteca es traer a la
memoria colectiva a un hombre idealista pero disciplinado, un soñador que logró
que sus sueños se hicieran realidad; quizá por eso es que en la noche del
festejo hubo quienes sonrieron por algún recuerdo traído a la memoria, y una
ovación de pie, con aplausos.
El Defensor La voz de Oaxaca. Año II. No 48.
1ª quincena de Noviembre del 2002. p. 8